La preocupación y el miedo por situaciones como las que hemos vivido con el COVID-19 y que no podemos controlar provocan que nuestro estado de ánimo decaiga. Esto puede provocar consecuencias en su salud física y emocional, especialmente si usted es adulto mayor.
Por ello es importante que sepa cómo detectar si el estado de ánimo interfiere negativamente en su bienestar. Tenga presente que una situación anímica cambiante puede afectar su salud.
A continuación, le explicaremos cómo los estados de ánimo influyen en la salud y le daremos una serie de consejos para que pueda mantener su bienestar integral.
¿Cómo influye el estado de ánimo en la salud?
Estar sano habla de un estado de bienestar completo; es decir físico, social y mental, al que muchas veces no le damos la importancia necesaria.
El ánimo forma parte de la salud mental. ¿Qué actitud muestra cuando surge alguna preocupación? ¿Experimenta mal humor, tristeza o enojo?
Prestarle atención a su estado de ánimo es más importante de lo que cree. Algunos estudios afirman que las emociones negativas pueden afectar considerablemente la salud, mientras que las positivas la potencian[1].
Por ejemplo, cuando nos enfadamos mucho podemos desarrollar enfermedades de origen cardiovascular, hipertensión arterial y dermatitis[2]. Por otro lado, la preocupación produce tensión muscular, la falta de motivación provoca dolor de pecho y la tristeza problemas digestivos[3].
Además, estas situaciones también pueden influir en la adopción de hábitos poco saludables que a la larga suponen impactos en la salud física. Por ejemplo, si su estado de ánimo afecta su calidad de sueño, es posible que su sistema inmunitario se debilite y aumente el riesgo de padecer diabetes[4].
En cambio, cuando sus emociones son positivas y usted presenta un buen estado de ánimo, es posible que tenga una presión arterial baja, un peso más saludable, mejores niveles de azúcar en la sangre y menor riesgo de padecer enfermedades cardiacas[5].
¿Cómo detectar que algo no va bien con su estado de ánimo?
El diagnóstico y la prevención son esenciales para mantener la salud mental. Usted puede contribuir a su bienestar, al detectar las señales de que algo no va bien con su estado de ánimo. Responder estas preguntas podría orientarlo[6].
- ¿Su humor varía constantemente?
- ¿Está más irritado que de costumbre?
- ¿Experimenta sentimientos de tristeza y ganas de llorar?
- ¿Le cuesta dormir?
- ¿Se le dificulta llevar a cabo sus rutinas de higiene?
Si las respuestas en su mayoría han sido “sí”, es momento de notificar a sus familiares y a su médico de atención primaria. El especialista podrá determinar el mejor paso a seguir.
Estos consejos lo ayudarán a mantenerse de buen estado de ánimo y cuidar de su bienestar mental[7]:
- La tecnología es su mejor aliado para mantener el contacto con el mundo exterior. Llame a sus hijos, comuníquese con sus amistades. Esta es la mejor forma de socializar.
- Haga actividades mentales y creativas como juegos de mesa o pintura.
- Duerma entre 7 y 9 horas diarias.
- Haga ejercicios o camine.
- Verifique si puede recibir ayuda en línea, por ejemplo, terapia ocupacional o terapia psicológica.
- Busque una actividad que lo mantenga ocupado, por ejemplo, sembrar hierbas medicinales para sus remedios naturales.
- Realice actividades que disfrute como ver televisión, hablar por teléfono, leer, bailar, cantar. Todo aquello que le haga feliz o incluso comience eso que tanto había querido hacer y nunca pudo.
Recuerde que una vida sana también implica cultivar un buen estado de ánimo. Siga estos consejos y comience su día con pensamientos positivos y ganas seguir cuidando su salud.
Sobre todo, tenga presente que la prevención es la base del estilo de vida saludable. Si presenta algún síntoma de ansiedad o depresión, consulte a su médico de atención primaria de forma inmediata.
[1] (Aroca, 2020)
[2] (Rodriguez et al., 2009).
[3] (Mayo Clinic, 2019)
[4] (MedLine Plus, s.f.)
[5] (NIH, 2015)
[6] (Instituto Nacional de Salud Mental, 2017)
[7] (Consejo Nacional sobre el Envejecimiento, 2020)