Viviendo con una afección de salud mental

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Viviendo con una afección de salud mental

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No está solo

Vivir con una afección de salud mental puede ser abrumador, pero es más común de lo que se piensa. Tal vez tenga síntomas debido a preocupaciones sobre el COVID-19, un cambio de trabajo u otros cambios en la vida. Hay muchas herramientas que puede usar para controlar sus síntomas y ayudarle a sentirse como usted mismo nuevamente.  

 

El tratamiento a menudo incluye medicamentos y terapia regulares. Tomar medicamentos para controlar una afección de salud mental puede resultar abrumador, especialmente si toma más de uno. Es posible que experimente efectos secundarios incómodos o que el medicamento no parezca funcionar de inmediato. Recuerde que los efectos secundarios son normales y generalmente desaparecen después de unos días. Asegúrese de hablar con su médico si experimenta efectos secundarios graves o tiene efectos secundarios durante más de una semana. Algunos medicamentos pueden tardar varias semanas en surtir efecto.

A continuación, se presentan más pautas a considerar:

      Tomar según lo recetado. Asegúrese de recibir instrucciones claras de su médico sobre la frecuencia y la cantidad de medicamento que debe tomar. Trate de tomar su medicamento a la misma hora todos los días y trate de no omitir ninguna dosis. No detenga ni cambie su dosis sin antes hablar con su médico.

·       Planifique con anticipación para que no se le acabe. Si compra sus medicamentso en una farmacia local cada mes, obtenga sus recargas al menos dos o tres días antes de que se le acabe. Si obtiene suministros para 90 días, solicite recargas al menos con dos semanas de anticipación. También puede hacer el seguimiento de sus días de recarga en un calendario y guardarlo donde lo tenga a la vista.

·       Cuando viaje, siempre lleve consigo sus medicamentos. Planifique para asegurarse de contar con suficientes medicamentos durante el viaje. Si puede, empaque medicamentos adicionales en caso de retrasos o cambios inesperados.

      Recuerde las marcas y los nombres genéricos de sus medicamentos. Hacer el seguimiento de los diferentes medicamentos que toma es importante para asegurarse de recibir la atención que necesita. Por ejemplo, Prozac es la marca del conocido antidepresivo, pero comúnmente se vende bajo el nombre genérico de fluoxetina. Si nota un cambio en el nombre, tamaño, color o forma de un medicamento cuando sea resurtido, consulte el farmacéutico para asegurarse de que sea equivalente al medicamento que estaba tomando antes.

·       Tenga cuidado al tomar su medicamento con otras sustancias. El medicamento que está tomando puede volverle sensible a la luz, al alcohol u otros medicamentos de venta libre. Siempre consulte con su médico antes de tomar cualquier medicamento adicional.

·       Nunca comparta su medicamento. Si bien puede ser tentador compartir su medicamento con amigos o familiares que presenten síntomas o inquietudes similares, hacerlo es peligroso. Su medicamento ha sido recetado específicamente para usted y podría tener un efecto diferente en otra persona, incluso con el mismo diagnóstico

La terapia regular, junto con los medicamentos, usualmente es crucial para controlar eficazmente una afección de salud mental. Asegúrese de pensar en sus metas. Pueden ser específicas, como administrar mejor el tiempo en el trabajo o comer de manera más saludable, o más generales, como mejorar la relación con sus seres queridos. Puede establecer tantas metas como desee, pero resulta útil comenzar poco a poco y desarrollar hábitos que se mantengan.

A continuación, le ofrecemos consejos adicionales:

      Investigue. Puede usar nuestra herramienta Find a doctor para encontrar un profesional de la salud mental o llamarnos al 888-447-2526 (TTY: 711). Si el profesional de la salud mental tiene un sitio web, revise sus especializaciones, como el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) o bipolar. Antes de programar una cita, comuníquese con el especialista que desea ver primero para confirmar que acepta el seguro de EmblemHealth.

      Recuerde que un terapeuta no lo “arreglará” ni le dirá qué hacer. Presionar al terapeuta para que lo arregle o le diga qué hacer puede generar sentimientos de desesperanza y frustración. En cambio, recuerde que su terapeuta está ahí para ayudarle a usar sus propias herramientas, como escribir un diario o meditar, todo para ayudarle en su progreso.

      Prepárese para las sesiones. Anote cualquier pregunta o tema en el que desee enfocarse durante su próxima cita.

      Deténgase si se siente incómodo o amenazado. A medida que empiece a hablar sobre los aspectos más personales de su vida y conducta, resulta normal sentir tristeza o incluso enojo después de una sesión. Después de todo, algunas situaciones y emociones no son fáciles de conversarlas. Al mismo tiempo, su espacio de terapia debería ser seguro. Si sintió falta de respeto, acoso o intimidación, busque un nuevo terapeuta de inmediato.

Dependiendo de la gravedad, algunas afecciones de salud mental pueden requerir hospitalización para ser tratadas y estabilizadas. Si se queda a pasar la noche, asegúrese de ver a un profesional de la salud mental dentro de una semana o menos. Su profesional de tratamiento le ayudará a continuar con un plan de atención adecuado para usted.

Los trastornos de uso de drogas y alcohol son "uno de los problemas de salud de más rápido crecimiento que enfrenta el país" de acuerdo con la Administración de Salud Mental y Abuso de Sustancias (SAMHSA) de los Estados Unidos. Es importante reconocer los signos y obtener ayuda para este complejo problema de salud conductual. Si usted es miembro de EmblemHealth, recibirá sus beneficios de salud conductual por medio de nuestro socio Carelon Behavioral Health (antiguamente Beacon Health Options). Para buscar un proveedor, consulte en línea o llame al 888-447-2526 (TTY: 711). 

Visite nuestro sitio web para obtener más información sobre cómo obtener ayuda y apoyo aquí.

Algunas veces, el estrés y la ansiedad de las enfermedades físicas, como una afección crónica, un evento traumático o una relación conflictiva, pueden interferir con su calidad de vida diaria. Podemos ayudarle.