- Programe un chequeo: Programe un chequeo de regreso a la escuela con el pediatra de su hijo. El médico evaluará cualquier problema de salud y se asegurará de que las vacunas de su hijo estén al día.
- Vaya a un examen de la vista: Los problemas de la vista pueden crear barreras al aprendizaje. Si su hijo menciona que tiene problemas para ver o si nota que entrecierra los ojos o cierra un ojo para ver mejor, prográmele un examen ocular.
- Establezca un horario de sueño: Haga que su hijo vuelva a tener un horario regular para acostarse antes de que comiencen las clases. Asegúrese de retirar los dispositivos electrónicos y otras distracciones de su habitación por la noche.
- Hable con el profesional de enfermería: Informe al profesional de enfermería de la escuela sobre los medicamentos que su hijo toma y sobre cualquier afección de salud del que debería estar al tanto, como las alergias o el asma. Trabaja con el enfermero para desarrollar planes de acción y comunica estos planes a los contactos correspondientes.
- Prepare su documentación: Organice los historiales clínicos de su hijo y actualice su información de contacto de emergencia. Complete un formulario de consentimiento para el tratamiento y entregue copias al profesional de enfermería de la escuela. El formulario permite que el personal de la escuela autorice el tratamiento médico en caso de emergencia y debe incluir información sobre los medicamentos, las afecciones médicas, el historia familiar relevante y los contactos de emergencia de su hijo.
- Compre suministros saludables: Además de bolígrafos, lápices y cuadernos nuevos, asegúrese de comprar muchos pañuelos descartables, apósitos y desinfectante de manos para que su hijo tenga a mano en la escuela. Si su hijo lleva consigo un inhalador o EpiPen a la escuela, verifique su fecha de vencimiento.